Cuando conoces a alguien realmente especial, tras algunas citas llega el momento de dar un paso en la relación y dejar de ser simplemente amigos. Preparar el mejor ambiente para este momento es importante, porque un mal paso puede echar por tierra todo. Una de las formas clásicas de organizar un encuentro que suponga un escalón en vuestra historia de amor es organizando una cena romántica en casa para contar con intimidad para hablar y conoceros mejor.
Todo es importante en una cena de este tipo. Por eso hay que escoger con cariño los platos. Evita aquellos que sean demasiado complicados de comer, como los mariscos. Eso es mejor dejarlo para más adelante cuando no nos importe sorber un poco o mancharnos los dedos delante de la otra persona. Pero para una velada romántica, mejor una comida más sencilla. Unos entrantes sencillos como una tabla de embutidos ibéricos pueden ser algo perfecto para comenzar a charlar y sentirse cómodos. Tal vez, de plato fuerte, un poco de ensalada y filetes de pescado, con un albariño selección rías baixas para acompañar. Si el pescado se hace al horno, no dará ningún trabajo y se mantendrá caliente mientras se disfrutan los entrantes, evitando tener que correr a la cocina para comprobar la cena a cada rato.
Si no cuentas con bombillas que puedan regular su intensidad, hazte ya con ellas. Así, podrás poner una intensidad de luz suave y darle a la habitación ese ambiente agradable similar a las velas, pero sin humos ni incomodidades. Elige una música suave para poner de fondo, muy discreta y a volumen bajo, que os proporcione una atmósfera íntima pero que no moleste. La distribución de la mesa es importante. Podéis poneros de frente para veros bien, pero lo ideal es estar uno al lado del otro, pudiendo miraros a la cara pero también sentir la cercanía de la otra persona, poder tocarla y disfrutar de esa intimidad tan agradable que comienza a surgir.
No olvides detalles como la limpieza y el orden, que son importantes no solo en dónde vais a comer sino en toda la casa. Y demuéstrale que le has tenido en cuenta con sus flores favoritas decorando la mesa o ese postre que ha comentado que tanto le gusta. Con todo esto, seguro que se siente muy especial y la velada es todo un éxito para los dos.