Una tarjeta con mucha memoria

Utilizamos las tarjetas de crédito para todo en nuestra vida diaria. Hay quién la usa con total normalidad incluso para pagar un café en un local. Y ahora que ya nos habíamos acostumbrado a ellas parece que quieren que desaparezcan y comencemos a pagar con nuestro teléfono móvil. Aunque seguramente ambos sistemas vayan a convivir durante mucho tiempo antes de que las tarjetas se destierren.

Así pues, las tarjetas por ahora aún están presentes en la mayoría de carteras. Pero, ¿sabías que algunas tienen poco crédito y mucha memoria? Sí, porque en realidad no son tarjetas de crédito bancarias sino un usb tarjeta de credito. Esto es, un lápiz de memoria con la forma de una tarjeta bancaria y con apariencia de tarjeta de visita.

Pero, ¿por qué hacer un lápiz USB con forma de tarjeta de crédito? La respuesta es muy sencilla, para poder guardarlo fácilmente. Seguro que más de una vez has tenido que buscar en el bolso o en maletín el lápiz con la información que traías guardada para el trabajo.

O para darle a un amigo con las fotos de una fiesta. Pues con un USB tarjeta no vas a tener este problema porque lo guardarás junto a tus tarjetas de crédito y tus carnets, siendo un plástico más que ocupa muy poco, pero te da mucho.

Estos lápices de memoria se fabrican con diferentes capacidades y dan respuesta a todo tipo de necesidades. Normalmente, tienen un USB estándar que puede utilizarse en el ordenador, aunque también los hay con mini-USB para móviles. Cada persona puede elegir qué tipo de lápiz prefiere y qué capacidad le resulta más adecuada para su uso.

También es frecuente que este tipo de USB de tarjeta se entreguen por parte de empresas como regalo promocional. Tiene la doble función de recordar los datos de la empresa, impresos en la tarjeta y de resultar útiles. Esto hace que las personas lo lleven normalmente encima por lo que tienen siempre presente la empresa y sus datos están a buen recaudo en caso de que un día quieran llamar o quieran recomendarla a cualquier amigo.

Esto lo convierte en un regalo promocional de gran utilidad. Y como además es frecuente que los USB se presten para intercambiar información, la propaganda de la empresa llegará a más personas de las inicialmente obsequiadas, por lo que el éxito será aún mayor.

Deja una respuesta