El duplicado de llaves es un servicio común en el sector de la cerrajería, y aunque pueda sorprender, no es una práctica tan moderna como pueda imaginarse. La máquina copiadora de llaves se creó en 1917 de la mano del estadounidense Andrew Heldrich, con patente registrada como «US 1218653». Más de un siglo después, el duplicado de llaves de coche Vigo, Madrid y otras provincias continúa siendo un servicio muy demandado.
Este proceso consiste en la obtención de una nueva llave a partir de una original denominada ‘llave virgen’, que se deposita en una mordaza conjuntamente con la segunda llave en otra mordaza; tras aplicar una ligera presión, el borde de la llave original queda ‘impreso’ en la nueva.
Disponer de una llave o juego de llaves de repuesto es una medida de seguridad necesaria para empresas y particulares. En periodos de ausencia, cuando la vivienda permanece vacía, puede declararse un incendio, suceder una inundación u ocurrir otras emergencias en el interior que requieran un acceso inmediato. En estas situaciones entra en juego la llave duplicada, que se entregará a un vecino o familiar cercano de confianza, para que actúe en caso de emergencia.
Con toda probabilidad, el extravío de llaves es la primera razón por la cual merece la pena disponer de un duplicado. Según una encuesta publicada en el rotativo británico Daily Express, 16 millones de conductores reconoce perder sus llaves con frecuencia, cifra que sería más elevada en caso de sumar a los propietarios de inmuebles.
Este incidente obliga, en condiciones normales, a solicitar los servicios de un cerrajero urgente, que reemplazará las cerraduras y nos permitirá acceder a la vivienda o el vehículo en cuestión. Sin embargo, el coste de este olvido será elevado y la molestia, considerable. Sin embargo, nada de esto sucedería si se contase con un duplicado de seguridad.