Mi mujer se echa a temblar cada vez que hay que hacer una compra importante. Sabe que se inicia un proceso bastante largo en el que yo tengo que seguir una serie de pasos. Ella dice que soy muy cuadriculado y que lo pienso todo demasiado. Y tiene razón: no puedo asegurar que mi formar de comprar sea la más adecuada y seguro que otras personas más impulsivas también pueden acertar. Pero cada uno tiene su forma de ser.
Yo necesito dominar el ámbito en el que tengo que comprar, sobre todo si se trata de inversiones importantes. Desde luego que hay sectores más sencillos que otros de ‘dominar’. Pero, por ejemplo, si quiero comprar un buen colchón para 8 o 10 años necesito mirar bien los tipos, características, marcas, modelo y sitios que los venden para que la inversión se adecuada. Lo mismo puedo decir de una caravana, nuestra próxima compra importante.
Nunca hemos comprado una caravana así que yo no tenía ni idea. Hay ciertos aspectos que son fáciles de entender, pero los catálogos son muy amplios y hay muchos modelos, por eso lo primero que hice fue entrar en un foro, exponer mis necesidades y dejarme guiar. Y dos compañeros me recomendaron una caravana sterckeman 470 segunda mano. Al principio, no tenía ni idea. Me sonaba la marca de cuando hice una primera aproximación a este sector.
Por supuesto, no voy a comprar una caravana tan solo por el consejo que me den unos foreros. Lo bueno de internet es que existe mucha información para contrastar y así pude comprobar que se trataba de una caravana con muy buenas referencias. Ahora quedaba el siguiente paso: encontrar un lugar con profesionales donde me terminaran de asesorar.
Mi mujer me acompañó a varios sitios donde pudimos echar un vistazo a la caravana sterckeman 470 segunda mano. Parecía una buena opción para lo que estábamos buscando, pero todavía esperamos un poco más (para desesperación de mi mujer) hasta encontrar un precio un poco más competitivo. Y, por fin, tuvimos nuestra caravana: espero haber acertado.