Seguramente te hayas dado cuenta de que las bombillas LED baratas son ya una realidad y tal vez estés pensando si te merece la pena cambiar todas las bombillas de tu casa. Pero la idea te produzca un cierto rechazo porque si has comprado hace poco tiempo bombillas de bajo consumo habrás invertido una buena cantidad de dinero y no te apetece que es vaya a la basura.
Sin embargo, sí deberías de cambiar ya todas tus bombillas a un tiempo. Y estas son las razones para ello:
-El mercurio. Es la razón más poderosa para hacer el cambio. Las bombillas de bajo consumo poseen una pequeña cantidad de mercurio que es altamente contaminante y peligroso. Seguro que tus padres te advertían mucho sobre el peligro en caso de que se rompiera uno de los antiguos termómetros de mercurio tan comunes en los hogares. Pues exactamente lo mismo sucede con las bombillas. Estarías sacando de tu hogar un elemento peligroso y que podría ser un riesgo para la salud de tu familia en caso de una ruptura accidental de la bombilla.
-La temperatura. Las bombillas de bajo consumo se calientan, al igual que las incandescentes. Por tanto, pueden quemar a los niños o a los adultos que las tocan. Esto es especialmente peligroso cuando acaban de apagarse y la persona que las toca lo hace pensando que están frías cuando no es así. Las bombillas LED no cogen temperatura, pueden tocarse incluso mientras están funcionando, sin suponer peligro ni para las personas ni para las mascotas.
-El consumo. Las bombillas LED consumen bastante menos energía que las de bajo consumo. Una bombilla incandescente de 80W, una de las más comunes en el hogar, equivale a una halógena de 40W a una incandescente de bajo consumo de 20W y a una LED de 10W. Las diferencias son más que evidentes y se van a notar en el consumo, sobre todo en hogares grandes. El 25% del gasto de electricidad de una casa tiene que ver con las bombillas. Si a esto se une que una LED dura cinco veces más que una bombilla convencional, el ahorro es todavía más notable.
Si con todo esto todavía te da pena tirar tus bombillas útiles, puedes reutilizarlas en habitaciones con poco uso, como por ejemplo un trastero o una despensa cuya luz se encienda solo en momentos puntuales del día.